Por Armando Almánzar-Botello
Un hombre solitario se derrumba en un espejo.
Reposando su agonía en el lavabo,
el reloj en su antebrazo lo disuelve...
El instante de la muerte cae ciego como el rayo:
Un vómito imprevisto y absoluto de ausencia...
Por las puertas entreabiertas
avanzan los reflejos,
el día recomienza.
Voces cristalinas de niños muy distantes,
la calle misteriosa y su revuelta, el río de vehículos y el humo
de foresta ennegrecida que se agranda...
Por el filo de un camino,
una esbelta mujer olvida el tiempo...
Noviembre del 2006
Francis Bacon vuelve. Slaughterhouse's crucifixion.
Editora Angeles de Fierro. Santo Domingo, R.D. 2007.
Página 17.
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