lunes, 1 de julio de 2013

LOS FALSOS PRECURSORES DE TODO.



Por Armando Almánzar-Botello



No se trata, para el creador auténtico, de “tomar la delantera" y "robarse", asentándolo con prisa en letra impresa y en libro tradicional, lo que ha sido un hallazgo poético-existencial comunicado ingenuamente a un compañero de oficio por el legítimo autor de dicha invención, en el calor de la oralidad turbulenta, y que resulta, muchas veces, un precipitado alquímico, cifrado en clave sintáctica, prosódico-semántica, de toda una vida minuciosamente sufrida y gozada, meditada en el oscuro fulgor de sus abismos.

¡Platón no se robó los pensamientos de Sócrates!

¡Cuántos poetas dominicanos y extranjeros roban la identidad oral de otros, y la causa única de su PRECEDENCIA es que tuvieron la oportunidad o el dinero suficiente para publicar como "propio" y “justo a tiempo” lo "robado"!

El aliento de estos versos, por ejemplo: “Odelisa veloz o detenida. / En el vértigo del tren el misterio suspendido. / Su cuerpo es la promesa irrepetible de su cuerpo. / Su sexo es el fulgor de un astro indescifrable... // La luz ya se derrumba. / El día se desangra y el vídeo se termina…”

El anterior fragmento pertenece a mi poema “Odelisa”. Por unos pequeños retoques que realicé tardíamente a dicha composición poética, figura en mi libro “Cazador de agua y otros textos mutantes”, por pura honestidad cronológica, fechado en junio de 2001. No obstante, corresponde, en efecto, a un poema de mi autoría originariamente producido en agosto de 1986.

Para esta última fecha, muchos jóvenes poetas locales, ulteriormente auto-declarados como cultores de una supuesta sensibilidad y temática erótico-amorosas, todavía no escribían nada, absolutamente nada en ese particular registro expresivo.

Pero aquí, en Dominicana, muchas veces no existe la honestidad intelectual, ni la verdadera amistad en el universo de las letras, ni la Memoria histórica fidedigna entre supuestos “amigos” que se leen sus poemas antes de publicarlos...

Sólo padecemos el oportunismo caníbal de los poderosos y arribistas, el disfrazado e ignorante oscuro afán beligerante de los que, siendo simples “epígonos malagradecidos”, se presentan en la escena política del mundo, 
con la falta de rubor típica de los canallas, como legítimos y sabiondos “precursores de todo”. 


© Armando Almánzar-Botello.
Santo Domingo, República Dominicana.

No hay comentarios: